Lo que estuve leyendo: Drácula.

El relato se presenta como una serie de documentos, como artículos periodísticos, telegramas, y principalmente diarios personales. Esto resulta una efectiva forma de contar la historia, principalmente al comienzo, donde los registros en el diario personal de Jonathan Harker mientras viaja hacia el castillo del conde Drácula, y luego durante su estadía, resultan una manera interesante de presentar la narración. Esta primera parte principalmente atrapa, al comenzar a describir el ambiente y las peculiares características del conde, que Harker va descubriendo.

El ritmo decae algo en durante algunas partes de la historia que transcurren el Inglaterra, aunque salvo algún momento muy puntual, sigue resultando entretenido. Al final, la persecución del conde, incrementa el ritmo nuevamente, aunque me resulto algo forzado la utilización de los diarios (que en esta parte usa exclusivamente) para este último tramo del relato.

           La historia es “pequeña” en cierta forma; a veces parece que no se mueve más allá de los hechos, y este apego le quita algo de la riqueza que se podría haber obtenido del tema. Tal vez lo más criticable es la falta de profundidad de algunos personajes, como el poco desarrollo que tiene el mismo Drácula. El grupo de amigo que acompaña a van Helsing en la aventura parece en ocasiones formado por el mismo personaje con distintos nombres (que siempre mantiene una actitud excesivamente correcta todo el tiempo). Aun así es difícil no simpatizar con algunos personajes, consigue buenos momentos y un clima que logra mantener el interés.

En general me resulto una lectura entretenida en la que conocí al famoso conde de primera mano, que resulta un personaje un tanto distinto del que presenta Hollywood. Personalmente creo que es recomendable para cualquier lector del género del horror y que difícilmente lo decepcione.